Hoy, Día del Libro, se entrega el Premio Cervantes a la escritora mexicana Elena Poniatowska, que, como dato anecdótico, participa en el documental «Hecho en México». En este país nos quedamos para hablar de «La región más transparente», la primera novela de Carlos Fuentes, uno de los escritores mexicanos más relevantes del siglo XX y referente intelectual de toda Latinoamérica.
Publicada en 1958 y considerada por muchos la predecesora del «Boom latinoamericano» (Cortázar, García Márquez, Vargas Llosa, etcétera), es el equivalente para México DF de lo que fueron en esa época «Manhattan Transfer» (de John Dos Passos) para Nueva York o «La Colmena» (de Camilo José Cela) para Madrid, novelas corales en las que el protagonista real es la ciudad en la que transcurre la acción.
Las mil caras de una «ciudad a fuego lento»
Novela de redacción vanguardista y estructura compleja, la acción transcurre fundamentalmente en la Ciudad de México de principio de los años 50 del pasado siglo, pero intercala saltos en el tiempo que abarcan desde la oligarquía latifundista de principios del siglo XX (representada por la familia De Ovando) hasta el periodo de la Revolución Mexicana y el posterior surgimiento de una burguesía que acapara el poder (ejemplificada en la figura de Federico Robles, un campesino que llega a banquero y afirma que «las revoluciones las hacen hombres de carne y hueso, no santos, y todas terminan por crear una nueva casta privilegiada«).
Pero si por algo es memorable esta novela es por mostrar un panorama poliédrico de México en general y de México DF en particular, «ciudad puñado de alcantarillas, ciudad cristal de vahos y escarcha mineral, ciudad presencia de todos nuestros olvidos, ciudad de acantilados carnívoros, ciudad dolor inmóvil, ciudad de la brevedad inmensa…«, ciudad que conocemos guiados por Ixca Cienfuegos, espectador de los dramas y las vidas que se entrecruzan, desde la miseria y violencia de los barrios populares hasta las tertulias de los intelectuales sobre la idiosincrasia de México («Si no se salvan los mexicanos, no se salva nadie«), pasando por las frívolas diversiones de la alta sociedad, cada uno de estos grupos sociales perfectamente retratados por su habla.
La novela incluye tanto un cuadro cronológico que muestra los principales acontecimientos históricos de la época en paralelo con la acción de la novela como un índice de personajes (al estilo de las novelas policíacas de Agatha Christie), lo que facilita bastante su lectura.
Como curiosidad, indicar que el título de la novela proviene de la descripción que del valle de México DF hace Alexander von Humboldt (el padre de la geografía moderna) en «Ensayo político sobre el reino de la Nueva España».