Colombia tiene un curioso sistema de clasificación de las viviendas del país. Mediante la llamada «estratificación económica», las ciudades están divididas en zonas residenciales (o estratos) que pagan diferentes impuestos por los servicios básicos de luz, agua, gas, saneamiento, etc. y el acceso a la educación, sistemas de salud, etc.

Es decir, si tú vives en una zona más rica (los estratos superiores), pagarás más por estos servicios que otra persona que viva en una zona pobre, e igualmente no podrás acceder a ciertos subsidios disponibles para los estratos inferiores.

Distribución poblacional de los estratos

¿Cuáles son los estratos? En total, son seis: estrato 1 (bajo-bajo), estrato 2 (bajo), estrato 3 (medio-bajo), estrato 4 (medio), estrato 5 (medio-alto) y estrato 6 (alto). En el siguiente gráfico se muestra la distribución de la población en función de los estratos, de acuerdo con el DANE de Colombia:

Es importante resaltar que el sistema de estratificación no contempla los ingresos de los habitantes de cada zona. Por tanto, cada ciudadano es libre de elegir en qué estrato quiere vivir, mientras pueda permitírselo. Además, la estratificación no implica mayor o menor belleza de una zona. Hay zonas rurales extremadamente hermosas que son estrato 2, y hay otras zonas urbanas sin personalidad, que son estrato 6.

A esto hay que añadir una serie de subsidios a los que pueden acceder los habitantes de los estratos 1, 2 y 3. Por el contrario, hay una serie de impuestos extra que pagan los de estratos 5 y 6. El estrato 4, pues, representaría la «clase media» (libre de impuestos extra, pero sin acceso a ciertos subsidios), aunque no es el estrato medio en Colombia, ya que la clase baja es la más predominante:

• La clase baja representa un 63,9% de la población en Colombia (estratos 1 y 2), con limitaciones en el acceso a servicios básicos como la sanidad o la educación y frecuentes cortes de suministro de luz o agua.
• La clase media representa casi un 33% de la población (estratos 3 y 4), que aunque gozan de buenos servicios (sobre todo el estrato 4), el salto cualitativo hacia estrato 5 es muy grande.
• La clase alta representa apenas un 3,1% de la población (estratos 5 y 6).

¿Justicia o segregación?

No es de extrañar que una de las primeras preguntas en la interacción social colombiana sea «¿En qué parte de la ciudad vives?». Es una forma que tienen los colombianos de categorizarse y dar por hecho un cierto nivel de ingresos. Aquí es donde surge la pregunta del millón: ¿La estratificación segrega a la población o realmente sirve para que los ricos paguen más y los pobres paguen menos?

En el caso de la capital Bogotá, hay casos en que puedes cambiar de estrato 1 a 6 con solo cruzar la calle, pero apenas existe interacción social entre individuos de estratos muy dispares. Otros casos, como el de Medellín, intentan luchar contra la segregación con infraestructuras como el metro o el teleférico (Metrocable) que llega hasta Parque Arví.