Cualquiera que viaje a Honduras encontrará una y otra vez la figura de un indio desafiante prácticamente en la plaza principal de cada pueblo o ciudad. Se trata del indio Lempira («Señor de la Sierra»), el símbolo de Honduras.
Esta foto corresponde a la estatua que hay en su honor en la localidad de Gracias, un pequeño pueblo en la zona de los lencas, que mencionamos en nuestro anterior podcast. Esta área fue en su día el bastión de resistencia contra la invasión de los españoles, a principios del siglo XVI, en cuya historia el indio Lempira cumplió un papel primordial.
Alianza y resistencia de Lempira
Cuando los españoles llegaron a la zona, había una guerra interna de clanes indios. El general Lempira fue el encargado de unir a más de 30.000 soldados de unos 200 pueblos en la resistencia contra los españoles. Vamos, el «Braveheart» hondureño. Tal fue la resistencia que hasta su muerte en 1539 los españoles no dominaron el territorio.
En la actualidad, el indio Lempira ha vuelto para quedarse, al menos en el bolsillo de los hondureños: desde la Gran Depresión que asoló América y el mundo, Honduras abandonó su antiguo peso hondureño para adoptar en 1931 al lempira como la nueva moneda nacional.